El fenómeno de los vídeos educativos en línea está en auge. En plataformas como YouTube es posible encontrar multitud de vídeos para cada uno de los contenidos curriculares. El alumnado recurre a ellos para resolver dudas, pero veremos que muchos de ellos presentan errores e imprecisiones y que hay una gran diversidad de enfoques. Así, interfieren con la negociación de significados y con las actitudes y creencias del alumnado hacia las matemáticas y su enseñanza. Por eso, si se emplean, es esencial que sea el docente el que seleccione (o produzca) aquellos que no entren en conflicto con su enseñanza.